viernes, 4 de septiembre de 2015

En dique seco.

A finales del mes pasado llevé la moto al concesionario oficial BMW, el motivo era que el tornillo de llenado de la caja de cambio se resistía a salir.

Fuí al taller oficial BMW Joaquim Oliva a ver que podían hacer,  la pasaron al taller y a los 10 minutos salió el jefe de taller con cara de poker, "Tenemos un problema" fue lo que me dijo.


Por lo que se ve se les fue la mano con el martillo y partieron la carcasa del cambio, la madre que les parió!!!! en fin a dejar la moto y a rezar para que no tardaran.

Esto ocurrió a finales de Julio, y me la han entregado a principios de septiembre, en definitiva que me han jodido las vacaciones, más de un mes sin moto, nunca he estado tanto tiempo sin moto y es aquí donde empieza mi historia.

Tengo la suerte de que mi pareja es motera, esta pasión por la motos hace que la moto sea el centro de cualquier cosa que organicemos, las vacaciones, ir a dar una vuelta ..... la moto siempre ha estado ahí.




Ella por solidaridad ( y que no sabe estar si mí ja ja ja)  aparcó la moto y renunció a las salidas, no organizó nada en todo el mes, bueno, no organizo nada para ir en moto, porque yo he pasado una de las mejores semanas en mucho tiempo.

La primera sorpresa, ir a buscar a los peques, nos los quedábamos toda la semana.



Bueno, solo deciros que estos dos enanos son los responsables de que los sábados no salga en moto, prácticamente desde que nacieron, los sábados, aparcamos la moto para estar con ellos.



Volvamos al tema que me pierdo, pues la semana se presentaba de la siguiente forma, por las mañanas haríamos de turistas y por las tardes dedicado a los críos (básicamente piscina y algún que otro juego).

Así un día lo dedicamos a ver el casco Antiguo de Tarragona, impresionante.




























Otro día a hacer de turistas por el puerto deportivo de Cambrils, esta zona me ha encantado siempre.





Y así íbamos llenando las mañanas,  ahhh y las tardes.... las tardes eran un regalo, los nenes habían aprendido a bucear y ahora la piscina era un nuevo mundo.


Llega el momento de devolver a los nenes, cosa que no me hace ninguna gracia, los hemos tenido 7 días, a Carmen aún le quedan tres días de fiesta y pensaba que quería descansar un poco, pero no, la nueva sorpresa era que el viernes nos íbamos a Andorra a pasar el finde.



El viernes, ya en Andorra, lo dedicamos a pasear y por supuesto comprar.







El sábado al balneario Caldea INÚU, estuvimos todo el santo día.



























Y el domingo, la vuelta por el Pas de la Casa.





En total unos 10 días de ensueño, y gratamente sorprendido. Que había pasado? que ha sido de eso de que la moto nos hace sentir libres? Después de tantos años sin dejar la moto parada más de 48h descubro que sin ella también me puedo sentir libre, puedo disfrutar de la naturaleza, puedo desconectar.

Esto solo me lleva a un razonamiento lógico, la libertad, la felicidad y todas esas virtudes que atribuimos a la moto no es más que un espejismo, la realidad es que el único factor que influye en todos esos sentimientos somos uno mismo.

Por cierto ayer me dieron mi moto, por fin esta en casa, al mirarla a los ojos casi me sentía culpable, después de tantas y tantas aventuras resulta que igual...




Viniendo del taller, camino a casa, después de más de un mes si tocarla, ahí estaba, pensando en el próximo destino, soñando y deseando que llegase el fin de semana para poder desquitarme de este mes de sequía.

Ahí, justo en ese momento, me di cuenta de que no era la moto lo que realmente echaba de menos, no era la moto lo que realmente me hacia feliz, lo que en realidad deseaba era simplemente su compañía, la de ella.






Hay dos formas de ver la vida: Una es creer que no existen milagros, la otra es creer que todo es un milagro (Albert Einsein)